Golf
Mía Yaya: balance, anécdotas y el Campeonato Argentino que viene
La joven habló del 2023 recorrido, del equipo que la rodea, la escuela y de sus objetivos.


Su casa, el campo del Concordia Golf Club, la escuela Secundaria D N°144 “Saint-Exupery”, la academia de inglés, el gimnasio “Maranhao” y el Club Estudiantes Concordia son algunos de los lugares que frecuenta la concordiense Mía Yaya.
Recientemente, a su hoja de ruta semanal le sumó una parada más: Presidente Illia 208, la sede de Oíd Mortales Radio, la casa del programa radial de “3200, el código del deporte” (sábados de 10 a 12 por www.oidmortalesradio.com.ar). Mía es de la casa, a sus 14 años ya lleva 3 temporadas visitando los estudios y regalando su frescura al hablar.
Balance
“La primera etapa del año venía jugando muy bien y ahora es como que bajé un poco y no vengo jugando como yo esperaba pero también me sirve de aprendizaje y que no siempre voy a hacer las cosas bien”, reflexionó ante la primera pregunta y admitió que, los actuales, son los mejores momentos para aprender.
Al momento de hacer un balance, recordó que en el primer semestre de 2023 viajó a dos países: en enero estuvo en Perú, representando a la Argentina (el equipo de la Asociación Argentina de Golf). “Me fue bastante bien, quedé tercera”, marcó y agregó que en abril estuvo compitiendo en Chile.
“Después tuve algunos torneos en Sierra de los Padres, donde gané las dos veces y luego jugué en Chacabuco y Chaco donde no me fue tan bien pero aprendí bastantes cosas”, reiteró la oriunda de Concordia que compite en la categoría prejuvenil (reservada para las nacidas de 2008 en adelante).


Aclaró que, “ahora, en estos meses, no voy a representar a Argentina. Sí lo hice a principios de año”, tal como lo había explicado y respondió también cómo vive cuando represente al país: “al principio estaba muy nerviosa y ahora es como un torneo común. Nada más que juego con la camiseta de Argentina, la bolsa, todo de Argentina”, marcó y redondeó: “creo que jugando para Argentina o jugando en mi Federación o acá soy la misma. No trato de cambiar nada”.
El otro repaso que hace, no es deportivo, sino más de perfil social. “Yo tengo amigos de bastantes lados. Por ejemplo: en Chile hice muchos amigos, la primera vez que fui y sigo en contacto con ellos. También, tengo en Uruguay, Paraguay, Perú y Bolivia”.
– ¿El deporte te permite generar nuevos vínculos y esto puede abrir puertas a futuro?
– Sí, por ahí me invitan a ir a Bolivia o a jugar torneos en Uruguay, a Chile a quedarme en sus casas y la verdad que eso es muy lindo.
-¿Es recíproco para Argentina: pueden venir a competir acá?
– Sí, también. Hay acá torneos internacionales a los que pueden venir y también los hospedamos en las casas.
Hay equipo
Cuenta la historia que fue en 1885 cuando un grupo de inmigrantes ingleses, que trabajaban en empresas afincadas en Buenos Aires, empezaron a practicar golf en territorio argentino. El deporte había nacido en el siglo anterior, tal como se conoce en la actualidad, aunque otros afirman que en la Edad Antigua era popular entre los romanos.
Como fuese su origen, lo que está en claro es que una disciplina eminentemente individual. El jugador, el green y su circunstancia podría decirse parafraseando al filósofo José Ortega y Gasset. Mía definió en dos palabras ese juego: “Me encanta”. Y detalló cómo lo vive en una jornada de competencia o en su club en Concordia: “salgo con mis amigas, hablo con ellas durante la caminata y después, cuando voy a pegar, trato de concentrarme en ese tiro y después sí sigo hablando”.
“Siempre trato de evolucionar y superarme día a día pero vengo jugando bien aunque, en los torneos, no me salen las cosas como yo quiero. Estoy con mi psicóloga y mi entrenador, hablo con ellos y me ayudan en todo lo que necesite”, explicó.


¿Quiénes conforman el “team Yaya” que acompaña a la golfista? “Está mi mamá y mi papá. También mi entrenador al que yo, cuando quiera, lo puedo llamar y hablar con él. No es de acá, es de Buenos Aires y se llama Juan Martín Verano. También siento el apoyo de mi hermano que, cuando yo no tengo ganas de ir, me dice: ‘vamos y jugás conmigo’. También mi psicóloga y mi entrenador del gimnasio”.
Explicó, al ser interrogada por el ida y vuelta con los que la ayudan, lo siguiente: “ahora con la psicóloga y el entrenador estoy entrenando la parte mental que es una de las cosas más importantes del golf y creo que todavía me cuesta. Con la psicóloga empecé hace poco pero me viene ayudando bastante con algunas actividades”.
Objetivos
En la escuela secundaria está en tercer año. “Vengo bastante bien, por ahora ninguna materia baja”, precisó y destacó a los del colegio “El Principito”: “Ellos, cuando falto, me ayudan, me explican los temas y después, si hay una prueba, me la toman y después cuando me voy de viaje estudio y me sale bastante bien todo”.
Estudiar es clave para todo joven que está en esa etapa del secundario. Para ella también lo es porque ve un futuro que la mantiene vinculada al golf: “Lo que quiero hacer con el golf es terminar la escuela y me quiero ir a estudiar a Estados Unidos a tratar de buscar una beca en una Universidad”.
En lo deportivo también sabe en qué enfocarse: “Ahora me estoy preparando para ir a jugar el Campeonato Argentino, en Córdoba. Mi objetivo ahí es ganar porque no vengo jugando bien pero creo que ahí es donde me voy a poner las pilas”.


En efecto, el Campeonato Argentino de Menores de 15 años se realizará, del 6 al 8 de octubre, en “La Cumbre Golf Club”, de la Federación de Golf de la Provincia de Córdoba. Será un certamen, individual, con 54 hoyos, por goles y sin ventana en el que se podrá competir tanto en la rama masculina como femenina.
Por si fuese poco, también practica handball (ocupa el rol de central o lateral). “Empecé en la escuela El Principito porque Daniela Toller había ido a dar clases de Educación Física. Yo justo en ese momento buscaba dónde jugar porque me gustaba y le pregunté y me invitó a ir a Estudiantes donde también se sumaron 4 amigas más. Fuimos juntas el año pasado pero este año es como que no estoy yendo tanto”, aclaró respecto a los tiempos que tiene para sus diversas actividades.
Así son los días de Mía Yaya, multifacética, disciplinada, competitiva y siempre enfocada en lo que vendrá, mientras aprende en el camino que va transitando.