De la bocha al cronómetro: la nueva vida deportiva de Victoria Román

Victoria Román tiene 30 años y una historia deportiva que pasó por varias etapas antes de encontrar su nuevo rumbo.Resumidamente, cambió el palo por la bici, el agua y las zapatillas. En la columna “La mujer en el deporte” de 3200 Radio (sábados de 10 a 12 horas por Oíd Mortales Radio fm 88.7), reflexionó sobre su transición del hockey al triatlón.

Cambios necesarios

La atleta oriunda de Concordia, comenzó su camino deportivo lejos de las canchas. “Arranqué haciendo danza, aunque todos se rían y me pidan que haga pasos de baile”, recordó entre risas. Pero fue el hockey el que la atrapó durante casi dos décadas.

Jugó en el Club Hípico de Concordia y luego en la Universidad del Salvador mientras estudiaba en Buenos Aires. Volvió a la capital del citrus en 2018, abrió un hostel y regresó al club de sus amores. Sin embargo, en 2023 decidió dejar el hockey tras varios conflictos con las asociaciones locales. “Entrenábamos como por amor al arte nomás. Y la verdad es que uno se entrena para competir”, explicó.

La transición no fue casual: Victoria ya entrenaba la parte física con ‘Palomo’ Segovia y necesitaba un nuevo objetivo. Así llegó el duatlón, aunque no tenía ni bicicleta. “Obvio que me re enganché, me compré todo” dijo, y no tardó en dar el salto al triatlón.

“Yo nunca nadé, pero yo soy así: me decís algo y yo lo entreno y doy todo, así que comencé a nadar con Matías Penco” comentó. Su primer triatlón fue en noviembre de 2023, con apenas dos días de experiencia en traje de neopreno. “Le mandé un mensaje a ‘Palomo’ que decía ‘yo tengo que llegar’ y llegué” declaró.

¿Deportivamente diferentes?

Pasar de un deporte colectivo como el hockey a uno individual como el triatlón implicó una transformación profunda. Victoria señaló que la diferencia está en la mentalidad: “En el hockey, un error se comparte. En el triatlón, todo es propio. Si no vas a entrenar, te perjudicas solo”.

Aunque algunos ven el triatlón como una disciplina más relajada, ella lo vive con intensidad: “A mí me tienen que frenar. Me gusta competir y saber qué tan cerca estoy del que tengo al lado”. Consideró que el hockey le dio una base sólida: “La disciplina la tengo innatamente, pero la mejoré en el hockey. No me cuesta entrenar porque yo elijo hacer esto”.

Mujeres comprometidas

Sobre el rol de la mujer en el triatlón, destacó que hay un compromiso profundo de mujeres adultas que compiten a pesar de sus responsabilidades laborales y familiares. “En el hockey hay más compromiso en la juventud. En el triatlón ves madres y trabajadoras que se organizan para entrenar tres disciplinas. Es impresionante y admirable”, analizó.

Hacer deporte nunca es fracaso

A quienes estén pensando en cambiar de deporte, Victoria les dejó un mensaje claro: “Que se animen. Hacer deporte nunca es fracaso. Siempre es bueno moverse y estar al aire libre”. Y puso como ejemplo a su madre, que empezó el gimnasio a los 60 años: “Nunca había ido antes, y un día se animó. Le encanta”.

Victoria Román es la prueba viva de que nunca es tarde para reinventarse en cualquier ocasión, y que cambiar de cancha puede ser un mejor partido. Su historia no solo habla de una transición deportiva, sino también de una transformación personal. Dejó atrás la comodidad de lo conocido, la seguridad del equipo, para enfrentar el desafío de ser la única responsable de sus avances y retrocesos.