Cultura
“Una constelación que se transforma en cada aparición”
Así define Gonzalo Zabala a Musgo, su creación. El sábado 12 de julio presentará Tupinambá en Concordia.

“Musgo es un proyecto solista, pero vivo acompañado de muchas voces”, define como una verdad revelada Gonzalo Zabala, el creador, performer y productor de la propuesta que se presentará el próximo sábado 12 de julio en el hostel “Concordia”, desde las 22.
“Una constelación que se transforma”
“En escena, Musgo es mi cuerpo, mi voz y mi diálogo con lo electrónico y lo orgánico. Sin embargo, cada presentación se abre al encuentro con artistas invitados que amplifican la experiencia: músicos, realizadores audiovisuales, artistas plásticos, poetas”, definió en el diálogo que mantuvo con @3200cultura.

Inmediatamente después, explicó: “no es una banda, pero sí una constelación que se transforma en cada aparición, entendiendo lo afectivo y lo artístico como una sola cosa”, marcó y dijo que la de Musgo es una “propuesta performática, poética y electrónica que indaga en los vínculos entre cuerpo, territorio y memoria”.
A través de la voz, el movimiento y las texturas digitales, el proyecto busca generar una experiencia viva, materializando lo que nos atraviesa—la historia, las violencias, los deseos—desde una mirada contrahegemónica, tanto en lo sonoro como en lo simbólico. No me interesa reproducir fórmulas: cada obra es también una pregunta, un acto de presencia, un modo de interrumpir el ruido dominante. Combina beats, paisajes electrónicos, palabra viva y una puesta en escena que dialoga con lo ritual, lo sensible y lo político., sin nombrarlo. Un sonido que se baila, se escucha y se siente con el cuerpo entero.

Así nació Tupinambá
-Tupinambá es el nombre del disco. ¿Cómo fue el proceso para concretarlo?
-Tupinambá nació como una necesidad de revisar el pasado para entender este presente. El proceso fue extenso, atravesado por momentos de estudio, experimentación e introspección. Investigué las misiones jesuíticas en la región de Concordia, la música barroca que resonaba en la selva y los sincretismos espirituales que emergieron del cruce entre el cristianismo y las cosmovisiones guaraníes, en especial la idea del Paraíso Terrenal o la Tierra sin Mal.
La invitación a escucharlo está hecha. Son 13 canciones disponibles en Spotify:
“El disco es un nuevo eslabón en esa cadena de fricciones y fusiones. No busca reconstruir la historia, sino activarla desde el presente: se mueve entre lo abstracto y lo concreto, entre la invocación y la denuncia”, afirmó luego y precisó que, “a través de beats, texturas electrónicas, documentos sonoros y paisajes emocionales, Tupinambá materializa una espiritualidad rota pero persistente. Es una obra que vibra entre las ruinas y el deseo, entre lo impuesto y lo que aún resiste”.
Al mismo tiempo, destacó que propone imaginar un presente y un futuro posible donde el vínculo entre el ser humano y su entorno vuelva a ser el centro de lo cultural. “Un gesto de reparación, pero también de celebración”, definió luego el artista.

Sele y Calypso, presentes
En la presentación del sábado 12 de julio, cuyas entradas a $5 mil ya están a la venta (solicitarlas por mensaje directo a @musgo__ o @selena.morel1) Gonzalo no estará solo. Lo acompañará Selena Morel, “una aliada indispensable en esta propuesta”.

“Su set abre y cierra la noche, no solo como acompañamiento, sino como parte integral de la experiencia. Sele trabaja desde una sensibilidad muy afín a la de Tupinambá: su selección musical indaga en la memoria, el trance y lo corporal como canal de conexión. Queremos que el público entre en esa atmósfera desde el inicio, para que el baile sea una forma de invocación”, destacó.
Además, Calypso ambientará el espacio, aportando una dimensión sonora y visual que complementa y enriquece la experiencia. “Contar con elles es un gesto afectivo y político, que potencia la colaboración y el entrecruce de energías. Lo que sucede cuando estamos juntes en escena es imprevisible y vital”, afirmó.

¿Y después de Concordia qué vendrá? “Después del 12 de julio, el disco Tupinambá se presentará oficialmente el 24 de julio en el Teatro Lavardén de Rosario y luego, el 13 de agosto, en Temple, en el Paseo La Plaza de la calle Corrientes, Buenos Aires”, anticipó.
También hay fechas en otras ciudades “en las que seguimos expandiendo las propuestas y los encuentros con el público”, marcó y cerró contando que “el disco ya se escucha en muchos países del mundo y la idea es continuar profundizando en la puesta en escena, la colaboración con artistas invitados y seguir explorando los ejes centrales del proyecto: cuerpo, memoria, territorio y espiritualidad”.