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Natación

Esfuerzo, constancia y superación que se enseña y aprende

Micol Reinaudo y Lara Cabrera tienen la palabra. Contaron sus experiencias en el Club Salto Grande.

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Micol Reinaudo y Lara Cabrera son parte de la escuela de natación del Club Salto Grande Concordia. Ambas fueron parte del programa 169 en radio de “3200, el código del deporte” que conducen Jonathan Leiva y Guillermo Acosta.

De nadar a enseñar

Micol empezó a nadar a los 3 años, compitió desde los 8 y ahora es la entrenadora del club que la formó. “Fueron casi 10 años nadando en el plantel, conozco el esfuerzo, sacrificio y el día a día de ellos porque lo viví”.

“Cumplí un ciclo como nadadora”, consideró al hablar de esa etapa en su vida por lo que admitió que “me costó y no” dejar de practicar activamente el deporte ya que “necesitaba hacer otra cosa de mi vida. Entonces me fui a estudiar y, ahora que volví como entrenadora, la verdad que me encanta, me encanta, me encanta”, repitió con entusiasmo.

“Fui muchos años nadadora y entiendo lo que ellos pasan. Entonces, ahora como entrenadora también entiendo a mi entrenador cuando nos exigía, nos motivaba y demás”, reconoció ante la atenta mirada de una de sus alumnas, Lara Cabrera, que nada desde 2022 (antes también jugaba al hockey) y, recientemente, fue elegida para integrar la Selección Nacional de Natación que compitió en el Torneo Promesas del Cono Sur.

Ponerse objetivos

La joven de 15 años, que se bien admite que le gusta mucho el estilo crol, actualmente se especializa en mariposa donde aseguró que “me está yendo muy bien”, fundamentalmente en distancias largas.

Sobre su maestra, dijo: “siento que he conectado más personalmente porque, como somos las dos mujeres, por ahí podemos hablar más o le puedo contar más mis cosas y he conectado más con ella”.

En esa evolución como atleta, ella misma analizó: “a comparación de 2023, hoy en día tengo una mentalidad diferente. Me pongo más objetivos porque antes no nadaba tanto, pero cuando empecé a competir me empecé a poner objetivos”, destacó y comentó que charló con su padre al respecto: “si no me pongo objetivos, yo me aburro”, dijo con total frescura.

En ese sentido, reveló que “el objetivo de siempre es mejorarme a mí misma, poder mejorar mis tiempos y lo hice ya que mejoré todos mis tiempos en el Entrerriano de octubre y el objetivo que nos habíamos puesto este año era ir al Cono Sur, que lo logré el mes pasado así que este año lo doy por finalizado”, afirmó y destacó: “mis objetivos de este año fueron cumplidos”.

Y profundizó la idea, explicando que había hecho varios deportes antes de llegar a la natación y siempre le pasaba lo mismo: “me aburría porque lo hacía nomás, nunca tenía ningún objetivo, ni nada”, marcó y, en cambio, resaltó que “ahora que me especialicé en la natación, cada vez que me pongo un objetivo intento cumplirlo y así se va llevando día a día los entrenamientos”.

Cumplir esos objetivos, para un atleta de alto rendimiento significa resignarse a ser parte de algunas actividades propias de la etapa adolescente. “Y yo hablo mucho con papá y siempre hablamos que hay que hacer un sacrificio, si es que nos vamos a poner a hacer un deporte así de alto rendimiento como lo hacemos”, reflexionó.

“Por ahí es pensar que, si salgo esta noche, no voy a rendir lo mismo mañana y si me vuelvo más temprano voy a rendir mejor o, si no voy y duermo y como bien, mañana voy a rendir el doble”, afirmó y prosiguió que se trata de “pensar el cómo quiero que me vaya mañana. Si es un tiempo que necesito para ir a algún nacional, ponerme a pensar que si no salgo esta noche voy a rendir mejor y hay que hacer el sacrificio”.

Guiarlos y dejarse guiar

“Lara respeta mucho los horarios, los turnos, los tiempos de descanso. Es metódica, podríamos decir”, dijo la entrenadora y habló de su rol para evitar la “desmotivación” de los atletas. “Es básicamente hablar con los chicos, preguntarles cómo están, incentivarlos, motivarlos con los entrenamientos más que nada como un apoyo. Estar en constante relación con ellos”, planteó.

-¿Cómo es el trabajo de una entrenadora?

-Más allá del día a día, es importante la conexión que tenés con los chicos y guiarlos en la natación. Además, tenés que seguir especializándote y saber cómo es la actualidad de esa función. Yo todavía sigo estudiando, estoy estudiando el Profesorado de Educación Física así que estoy aprendiendo también.

Micol es la única entrenadora del plantel de 14 nadadores (el más chico tiene 8 años y la mayor 17), luego hay otros profesores que están en la Escuelita de Natación que tiene fines más recreativos.