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Fútbol

A pura garra y gambeta

Del fútbol entrerriano a la reserva de un club modelo: la historia de Juan Pucheta.

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Dejar todo atrás para perseguir un sueño no es fácil para nadie. Tampoco lo fue para Juan Pucheta, un joven nacido en Concordia, Entre Ríos, que desde chico tuvo claro lo que quería: jugar al fútbol en un equipo profesional. A sus 17 años, y después de pasar por varios clubes locales, hoy está cada vez más cerca de cumplir su objetivo. Actualmente milita en la reserva de Defensa y Justicia, uno de los clubes modelo del fútbol argentino.

“La verdad que fue muy duro, años de sacrificio”, dijo Juan que se desempeña en la posición de extremo sobre el camino que lo llevó hasta Buenos Aires. Su recorrido comenzó en clubes de su ciudad como Unión de Villa Jardín, Real Concordia, Constitución, La Bianca y el salto a Estudiantes de La Plata. Cada paso fue una construcción de lo que hoy es su presente.

El camino del sacrificio y la esperanza

En la nota con 3200, el código del deporte contó que, al llegar a Buenos Aires, el cambio fue rotundo. “A lo primero extrañaba todo, pero con el tiempo te acostumbrás. Era lo que quería y lo que buscaba de chico el poder jugar en un equipo profesional”, destacó.  Y agregó: “Actualmente estoy muy contento de estar en Defensa y Justicia porque todo el esfuerzo que hice para llegar acá valió la pena”.

El salto desde Concordia al fútbol de elite no fue solo geográfico. También implicó una transformación deportiva. “En el fútbol de Concordia no es tan intenso y acá si la hay, es otro estilo de juego y es mucho más táctico”, explicó sobre las diferencias que encontró en el nivel de competencia. Cabe señalar que en su paso por el “Pincha” fue convocado a la Selección Argentina para entrenar con su categoría en la que vivió una experiencia extraordinaria.

Gambeta elegante y juego de uno contra uno

En este marco, destacó que sus referentes no son casuales: admira a Lionel Messi como ídolo y se inspira en el colombiano Luis Díaz por su estilo de juego. La gambeta, el uno contra uno en banda y la intensidad que le pide el cuerpo técnico son sus principales virtudes. “El cuerpo técnico me pide que sea intenso cuando vamos a presionar y que juegue el 1 contra 1 en banda”, aseguró.

Juan que se prepara con la reserva del “Halcón de Varela” en la pretemporada no pierde de vista lo que viene: “Las metas que tengo son poder debutar en la reserva, ya que estoy haciendo la pretemporada con ellos, y después debutar con la primera. Y deseo volver a la selección nacional”.

Entre el entrenamiento, el estudio y la ilusión

Para lograr sus objetivos sabe que a todo se llega en base a sacrificio y una rutina estipulada. En la entrevista señaló que su día comienza temprano. “Me levanto a las 6 de la mañana, desayuno, me voy al club, nos cambiamos, hacemos gimnasio, después vamos a campo a entrenar. Cuando terminamos como y me voy al colegio hasta las 6 de la tarde. Me tomo un colectivo para ir a mi casa, llego, meriendo y después a veces meto doble turno. Después, cuando termino el gimnasio, como y me acuesto a dormir”, destalló. La rutina es exigente, pero él no se queja. Lo vive como parte del proceso.

Antes de cerrar, deja un mensaje a los chicos que sueñan como él: “Que siempre le metan, que no bajen los brazos. Que con humildad, sacrificio y disciplina llega todo”. Juan Pucheta eligió el camino del esfuerzo. Hoy su historia inspira. Y su sueño está más vivo que nunca.

“Con humildad, sacrificio y disciplina se llega a todo”

Antes de cerrar, Pucheta quiso dejar un mensaje para todos los chicos que, como él, sueñan con llegar lejos en el fútbol y en la vida. Con la sencillez que lo caracteriza, afirmó:
“Que siempre le metan, que no bajen los brazos. Que con humildad, sacrificio y disciplina llega todo”.

Estas palabras resumen no solo su filosofía, sino también el camino que eligió recorrer: uno marcado por el esfuerzo constante, la paciencia y la determinación, valores que hoy lo mantienen firme y enfocado en sus objetivos. Con el apoyo incondicional de su familia y su entorno cercano, sabe que la meta está cada vez más cerca.