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Básquet

El campeón local va por un desafío mayor

Capuchinos arranca el Prefederal con Santiago Rodríguez con coach, un plantel fortalecido y el apoyo incondicional del hincha.

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Este viernes 1 de agosto, en cancha de Vélez Sarsfield de Chajarí, el Centro Ex Alumnos Capuchinos se presenta ante el local por la fecha 1 de la conferencia 3 del Prefederal de Básquet 2025. Llega a la competencia provincial luego de ser campeón en el Asociativo local.

Fortalezas del equipo

Santiago Rodríguez es el entrenador de los aurinegros. A la hora de hablar del título conseguido en la final frente a Ferrocarril de Concordia, destacó las tres fortalezas: “Una es extradeportiva y es el grupo. No se conoce ningún equipo que realmente gane sin tener un grupo fuerte y nosotros lo teníamos”.

“Otro es la identidad de juego que teníamos: tomar muchos rebotes y correr. Fue una identidad clara que hizo que nosotros, en todos los juegos o en casi todos, marcáramos muchos puntos”, valoró en la entrevista concedida a “3200, el código del deporte” y completó con el tercer aspecto clave: “la fortaleza mental. Pasamos momentos, sobre todo en el final del torneo, adversos en lo deportivo y no deportivo que hicieron que, con la fortaleza mental, salgamos adelante”.

En esta primera fase de la Liga Provincial de Mayores, el denominado Preferal, competirán 32 clubes entrerrianos, un verdadero récord. Capuchinos integra la Conferencia 3 con Ferrocarril y Estudiantes Concordia; Social y Deportivo Federación; Santa Rosa y Vélez Sarsfield de Chajarí; Social y Deportivo San José y La Armonía de Colón.

“Arrancamos de cero”

El “Abuelo” Rodríguez, apodo que él mismo contó que se lo puso Ricardo “Nene” Lagraña cuando era su entrenador en Club Salto Grande (sí el “Nene”, siendo adulto, le puso “Nono” o “Abuelo” a un gurí que entonces tenía sólo 8 años), recordó: “arrancamos el torneo local de 0, sin nada. La idea en el Prefederal es arrancarlo con 5 ó 6 jugadores del torneo local y ya con una estructura encaminada”.

Destacó, entonces, que el comienzo fue en 0 el 17 de febrero y que hoy arrancarán agosto teniendo 5 ó 6 jugadores que enriquecen el equipo. “Además, hay una dinámica con elementos, pelota, agua, etcétera, que ya habíamos conseguido durante el torneo. Quiero decir que ya no estamos tan de 0 y la idea es que esto sea el comienzo y que el año que viene lo encuentre un poquito mejor y el siguiente torneo un poquito mejor”, dijo sobre el rumbo a seguir.

3 claves para armar el plantel

¿Cómo se armó el plantel entonces? “El club tenía como política hacer pocas cosas y ordenadas. No abarcar mucho y andar inseguro. Como política fue primero tener jugadores que vivan acá, segundo repetir una gran parte del plantel del torneo local para darle continuidad y tercero tener jugadores de jerarquía”, respondió.

Destacó, al respecto, que se sumó al base Facundo Ortiz, “que es un jugador que ya estuvo en Capuchinos, unos cuantos años, salió campeón, conoce el lugar”, valoró sobre el proveniente del “Verde” de Concordia y mencionó el caso del pívot Alejandro Madera: “viene a jugar 3 años en Sportivo San Salvador, como una de sus figuras principales. Es un grande que por ahí en el básquet escasea”, valoró y dijo que “era una prioridad para poder ser competitivo”.

“Después, sumamos a jugadores que nos alargan la rotación, como son Joaquín Lanaro (pívot) que jugó en Social Federación, el año pasado del Prefederal. ‘Nacho´ Lanzani (escolta), que es un U21 que jugó en Estudiantes”, mencionó y siguió: “Juan Cruz Basualdo (alero), que estuvo en Ferro el año pasado. jugando el Prefederal, que se fue a jugar a Córdoba y también es un U21 que son fichas importantes para lo que es un torneo”.

“Nos dan calidad y nos alargan el equipo para jugar el torneo”, elogió el entrenador a la vez que recordó que Capu confirmó las continuidades del escolta y capitán Gastón Langenheim, el alero Iñaki Garat, el ala pívot Agustín Pérez y el escolta Sebastián Ozuna.

El balance para la institución cuyo gimnasio definitivo, propio, está ubicado en avenida Salto Uruguayo 420 (donde jugará por primera vez en el Prefederal el domingo 10 de agosto cuando recibirá a Santa Rosa), es positivo por donde se lo mire. “Armamos un equipo de 0. No nos conocíamos tanto como grupo, entonces fue un crecer partido a partido, entrenamiento a entrenamiento. Es una frase hecha, pero es la realidad”, enfatizó sobre el proceso que se inició con el respaldo de dirigentes como Mariano Pastor y Matías Bonetta, entre otros.

Apoyo del público


Inmediatamente después, Rodríguez ponderó el acompañamiento del hincha. “Ese fue el gran objetivo de volver a jugar en Primera con Capuchinos: poder atraer toda esa gente, otra vez a la cancha”, reveló y dijo que eso ocurrió “desde el segundo partido que jugamos local contra Estudiantes. La gente nos empezó a acompañar, mucha gente hubo en Estudiantes, contra Ferro en la fase regular también, muchísima gente”.

“En semifinal con Federación, los tres partidos con Ferro”, sucedió lo mismo y dijo que “fue un público que acompañó en todas las fechas y también ayudó que se jugara domingos y viernes, en unos buenos horarios. La verdad que, desde el primer partido al final, la gente que es de Capuchinos nos acompañó”, agradeció.

Se armó “un grupo de trabajo más sólido”

¿Hay razones para creer que lo que viene va a ser aún mejor?, fue el último interrogante que respondió así: “Seguro. Cuando salimos campeones del torneo local, festejamos ese día a la noche y nosotros ya estábamos con el armado el equipo para el Prefederal. Ahí se nos interpuso esa ida: ‘¿bueno, ahora como seguimos?’”.

En definitiva, “el torneo local se utilizó para volver y traer un montón de gente y también para armar un grupo de trabajo mucho más sólido. Estos cuatro meses hizo que el club tenga tiempo para armar un grupo de trabajo más sólido”, destacó “Santi” y dijo que para el Prefederal que arrancarán este viernes en Chajarí “tenemos un montón de garantías”.

“Lo poco o mucho que tenemos está asegurado, tanto desde el proyecto de lo económico como de materiales para trabajar y de gente que anda atrás de esto. Bueno, ese torneo local valió la pena para poder estar tranquilo durante estos 5 meses que es una convivencia muy fuerte y donde hay que estar presente, hay imprevisto y demás”.

Cerró diciendo: “ya tenemos un cuerpo médico armado: radiólogo y traumatólogo. Un jugador se golpea y a la media hora ya sabemos qué es lo que puede llegar a tener. Eso no lo teníamos y si hubiéramos salido campeones y no lo hacíamos, no valía, se disuelve”.